Ese modelo se enfoca en la necesidad de profundizar el uso de la oralidad como herramienta de trabajo, como método para la toma de decisiones y mecanismo para la gestión de la prueba. La oralidad constituye entonces el principal eje de cambio y reformulación del proceso civil, por ello, el desafío de todos los actores y actoras que inciden en la construcción del funcionamiento del sistema de justicia, es trabajar y consustanciarse con las reglas y técnicas de la oralidad. En ese marco, el curso sobre “Litigación oral en el nuevo modelo de proceso civil” se relaciona con conocer y aplicar el funcionamiento de la oralidad en los procesos judiciales civiles.